
Por: Eduardo Mendoza
Laboratorio de Análisis para la Conservación de la Biodiversidad, Instituto de Investigaciones sobre los Recursos Naturales, Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo. eduardo.mendoza@umich.mx
Dedico esta contribución con mucho afecto al Dr. Rodolfo Dirzo, pionero y líder a nivel mundial en el estudio de la defaunación.
Progresivamente se ha alcanzado un mejor entendimiento del impacto que la transformación drástica de los hábitats naturales y la sobre-explotación de los recursos naturales tiene sobre la fauna silvestre. En el caso de los mamíferos, la lista roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN) indica que cerca de una cuarta parte de las especies, en este grupo, enfrentan un serio riesgo de extinguirse (categorías: “critically endangered”, “endangered” y “vulnerable”) (IUCN 2021). Además, una revisión detallada de esta lista revela que cerca del 18% de las especies de mamíferos terrestres de México están amenazadas globalmente (IUCN 2021). Por otra parte, la Norma Oficial Mexicana 059 (SEMARNAT 2019) indica que alrededor del 27% de las especies de mamíferos terrestres del país están en alguna categoría de riesgo (probablemente extinta en el medio silvestre, amenazada, en peligro de extinción y sujetas a protección especial). Estos datos constituyen una primera aproximación a la amenaza que enfrenta la fauna de mamíferos silvestres globalmente y en un país altamente diverso como el nuestro, sin embargo, representan sólo la punta del iceberg. La disminución en la abundancia de los mamíferos conlleva a su vez una pérdida de las funciones ecológicas que esta fauna desempeña. Las consecuencias de este fenómeno han sido especialmente resaltadas en los casos que involucran funciones que representan servicios ecológicos muy evidentes para los humanos, como por ejemplo la polinización de plantas como los agaves (Trejo-Salazar et al. 2016). No obstante, existen diversas manifestaciones del mismo fenómeno. Por ejemplo, en un estudio reciente se comparó la fauna de mamíferos que consume los frutos del árbol del mamey (Pouteria sapota) que se depositan en el piso de la selva en dos regiones del sureste del país (Los Tuxtlas, Veracruz y la reserva de la biósfera Montes Azules en Chiapas). Estos sitios se caracterizan por haber tenido una fauna de mamíferos silvestres muy similar, pero actualmente presentan estados de conservación muy contrastantes. En este estudio se encontraron diferencias notables, entre sitios, en las características de la interacción entre los frutos del mamey y la fauna (Figura 1). Destaca el hecho que mientras que en Montes Azules los tapires (Tapirus bairdii) fueron la especie que interactuó con mayor intensidad con los frutos, en la Estación de Biología Tropical de la UNAM, en Los Tuxtlas, los mamíferos que más interactuaron con los frutos fueron los coatíes (Nasua narica) (Zamora-Espinoza et al. 2021).

Más aún, al analizar esta interacción en árboles de P. sapota fuera de la estación de biología de la UNAM se encontró que los mamíferos que más intensamente interactuaban con los frutos ¡eran las vacas! (Figura 2A). Es de destacar que tanto al interior como al exterior de la reserva de la UNAM se registraron grupos de perros consumiendo los frutos de mamey (Figura 2B). Varias consideraciones interesantes se derivan de esto. Por una parte, es evidente que aun en áreas protegidas el impacto humano sobre la fauna ha llevado a la alteración de las interacciones bióticas, de manera directa, debido a la extirpación de algunas especies de mamíferos y de manera indirecta al propiciar interacciones negativas entre la fauna introducida y la fauna nativa. Esto tiene el potencial de afectar los procesos de regeneración de la vegetación. Por otra parte, es de resaltar que el hecho de que árboles como los de P. sapota se vuelven focos de atracción para una variedad muy amplia de animales, que incluye fauna nativa e introducida, puede llevar a un contacto más cercanos entre la misma favoreciendo la transmisión de enfermedades en ambos sentidos y potencialmente, incluso, a los humanos.

Referencias
- IUCN (2021). The IUCN Red List of Threatened Species. Versión 2021-1. https://www.iucnredlist.org. Descargada: 26 de junio del 2021.
- SEMARNAT. (2019). Norma Oficial Mexicana NOM-059-SEMARNAT-2010, Protección ambiental– Especies nativas de México de flora y fauna silvestres– Categorías de riesgo y especificaciones para su inclusión, exclusión o cambio– Lista de especies en riesgo. Diario Oficial de la Federación 14 de noviembre, 2019.
- Trejo-Salazar, R. E., Eguiarte, L. E., Suro-Piñera, D., & Medellín, R. A. (2016). Save our bats, save our tequila: industry and science join forces to help bats and agaves. Natural Areas Journal 36(4): 523-530.
- Zamora-Espinoza, M.,López-Acosta, J. C. & Mendoza, E. (2021). Anthropogenic perturbation modifies interactions between mammals and fruit in a tropical forest of southern Mexico. Aceptado en Animal Biology.
Reseña del autor

Eduardo Mendoza Ramírez. Biólogo por la Facultad de Ciencias de la UNAM. Obtuvo el grado de Doctor en Ciencias en el Instituto de Ecología de la UNAM. Ha realizado estancias de investigación en la Universidad de California en Los Angeles y el Departamento de Biología de la Universidad de Stanford. Actualmente es profesor-investigador en el Instituto de Investigaciones sobre los Recursos Naturales de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo donde coordina el Laboratorio de Análisis para la Conservación dela Biodiversidad y, es responsable del Museo de Historia Natural de la misma institución. Una de sus principales líneas de investigación es el impacto que la defaunación tiene sobre las interacciones bióticas y el mantenimiento de la biodiversidad.